La meditación contiene muchas definiciones posibles que, aunque complementarias, pueden parecer distantes entre sí y causar confusión en la mente de quienes intentan comprender su significado. Si tomamos la definición de Larousse, por ejemplo, descubrimos que la meditación es " la acción de pensar, pensar profundamente en un tema, la realización de algo ". Esta definición está bien fundada, porque la expresión "meditar en un problema" se usa a menudo en el lenguaje cotidiano cuando uno entra en una reflexión con el objetivo de encontrar soluciones.
Esta definición general de la meditación como un proceso racional y analítico, sin embargo, parece contradecir la de la meditación como una práctica espiritual, religiosa o de salud, ya que se caracteriza por el contrario por la trascendencia del pensamiento. ausencia de pensamiento analítico específico de la mente. Diríamos que estas dos definiciones no son contradictorias en la medida en que el proceso de reflexión en cuestión se encuentra en diferentes niveles.
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